¿Sabías que pintar mándalas ayuda al equilibrio emocional y al autoconocimiento? Crear mándalas y/o colorear es beneficioso para nuestro equilibrio emocional, nos ayuda a mantener un estado de concentración que despierta nuestros sentidos e ilumina nuestra creatividad.
Su origen se remonta a la India. El psiquiatra y fundador de la escuela de psicología analítica Carl Gustav Jung a mediados del siglo XX denominó los mándalas como expresiones probables del inconsciente colectivo. Para Jung, el centro del mándala simboliza el “sí-mismo”, que el sujeto intenta perfeccionar en el proceso de individualización.
Colorear mándalas no solo es cosa de juegos infantiles. La terapia con mándalas para niños y para adultos cuenta con múltiples beneficios y es una forma de arteterapia.
- Ayuda a relajarse. Este tipo de figuras orgánicas o geométricas tiene un componente espiritual: el simple hecho de observarlo produce una cierta sensación hipnótica que relaja y produce calma.
- Mejora nuestra capacidad de concentración. Al tratarse de figuras geométricas con cierta simetría, es necesario estar concentrado para no equivocarse en qué línea pintas de determinado color, por lo que la atención se centra en la tarea para lograr el equilibrio y la armonía en el dibujo.
- Forma parte de la meditación. Al pintar mándalas estamos practicando mindfulness, ya que nos centramos totalmente en la tarea y, por tanto, no pensamos en las preocupaciones del día a día o las tareas pendientes.
- Reduce los niveles de estrés y ansiedad. Al relajar nuestro cuerpo a nivel fisiológico y dejar a un lado las preocupaciones, reduce los niveles de ansiedad y estrés producidos por las situaciones cotidianas o problemas actuales. Varios estudios han demostrado que pintar mándala reduce la ansiedad mucho más que pintar cualquier otro dibujo o en otra superficie.
- Dejamos descansar a nuestra parte racional. Al pintar mándalas activamos el hemisferio derecho ( parte creativa, espacial y emocional) de nuestro cerebro y permitimos que el izquierdo (hablamos, escribimos, pensamos) deje de funcionar a pleno rendimiento al menos durante un rato.
“Como dijo Carl Gustav Jung, los mandalas son la totalidad de nuestra mente, la parte consciente y la inconsciente”.
- Ayuda a la expresión e identificación de emociones. Colorear mándalas sirve para dar rienda suelta a la expresión emocional así como a valorar o calificar el estado emocional que se tenía mientras se pintaba.
- Propicia la aceptación personal y el autoconocimiento. Se puede decir que pintar mándalas tiene un componente terapéutico porque facilita la aceptación de la situación así como los defectos y virtudes que se tienen y propician el cambio terapéutico.
- Fomenta la creatividad. Ya sea pintando o incluso creando y posteriormente pintando el mándala, pensar en los colores a utilizar, cómo distribuirlos en el espacio y cómo combinarlos, hace que se desarrolle una parte creativa que a veces podemos incluso dudar que tenemos. Observar la creación una vez realizada y recrearse en ella ayuda a mejorar la sensación de bienestar, satisfacción y de trabajo bien hecho, por lo que además, ayuda a subir los niveles de autoestima.
Nuestros mándalas imantados, al poder pintarlos, borrarlos y volverlos a pintar ofrecen muchas variantes para explorar la combinación de colores y mientras pintamos nos divertimos y nos distendemos. Otra de las opciones que tenemos con los mándalas es que los diseñamos para souvenir de cumpleaños. Éstos los hacemos a gusto de los padres y niños para que les quede de recuerdo de esa fecha tan especial!!!!
Nosotras seguimos investigando y aprendiendo, por eso siempre estamos abiertas a crear nuevos productos!!!! 💋💋💋
Nuestra Fuente: Encarni Muñoz Silva. Psicóloga sanitaria, colegiada nº 16918
https://www.mundopsicologos.com/articulos/por-que-es-beneficioso-pintar-mandalas
Saludos virtuales
Florencia 🙂